Cómo integrar la Palabra de Dios en mi vidac
February 18, 2023 / Brian T. Anderson / Vineyard Church North Phoenix40 Días en la Palabra
Cómo integrar la Palabra de Dios en mi vida
I. Introducción
A. Juan 8:31-32 (NTV) 31 “Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos; 32 y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres”.
II. ¿Cómo integro la Palabra de Dios en mi vida?
A. Al poner la Palabra de Dios como en mi vida
1. Mateo 7:24-25 (NBLA) 24 “Por tanto, cualquiera que oye estas palabras Mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca; 25 y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca”.
2. No construyas tu vida en:
a. La popular
i. Éxodo 23:2a (NTV) “No te dejes llevar por la mayoría en su maldad”.
b. La
i. Marcos 7:8 (NTV) “Pues ustedes pasan por alto la ley de Dios y la reemplazan con su propia tradición”.
c. La
i. Proverbios 14:12 (NBLA) Hay camino que al hombre le parece derecho,
Pero al final, es camino de muerte.
d. Los personales
i. ¡La mayor parte de lo que se logra en el mundo de hoy lo hacen personas que no tenían de hacerlo cuando lo hicieron!
ii. Jueces 21:25 (NTV) En esos días, Israel no tenía rey; cada uno hacía lo que le parecía correcto según su propio criterio.
3. La fórmula de Dios para las relaciones
a. ¡En vez de tratar de encontrar la persona correcta, en la persona correcta!
b. ¡En vez de “caer en amor”, en amor!
i. ¡El amor es al yo escoger necesidades por encima de las mías!
c. ¡Fijar mi esperanza en y honrarlo a través de mi relación!
d. ¡Si hay fracaso, los pasos, uno, dos y tres!
B. Al poner la Palabra de Dios en la de mi vida diaria
1. Mateo 6:33 (NBLA) “Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas”.
2. Darle a Dios lo “”
3. Leer la Biblia
4. por lo menos de 5-10 minutos por día
a. Filipenses 4:6-7 (NBLA) 6 Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios. 7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.
C. Al poner la Palabra de Dios como para las dificultades de la vida
1. Efesios 6:12 (NBLA) Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra las fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes.
2. II Corintios 10:3-5 (NBLA) 3 Pues aunque andamos en la carne, no luchamos según la carne. 4 Porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas; 5 destruyendo especulaciones y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, y poniendo todo pensamiento en cautiverio a la obediencia de Cristo.
3. II Corintios 9:8 (NBLA) Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, a fin de que teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas, abunden para toda buena obra.
4. Salmos 103:3 (NTV) Él perdona todos mis pecados y sana todas mis enfermedades.
5. Filipenses 4:13 (NBLA) Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
6. Salmos 27:1a (NTV) El Señor es mi luz y mi salvación, entonces ¿por qué habría de temer?
7. I Juan 4:4 (RVA) Hijitos, ustedes son de Dios, y los han vencido, porque el que está en ustedes es mayor que el que está en el mundo.
D. Al poner la Palabra de Dios como en los días oscuros que vienen a mi vida
1. Salmos 119:105 (NBLA) Lámpara es a mis pies Tu palabra, y luz para mi camino.
2. ¿Qué haces cuando está oscuro? ¡Prendes la !
3. “Dios, cumple tu promesa. Voy a comenzar a leer tu Palabra. Muéstrame lo que quieres que haga”.
III. Aquí está el desafío que quiero que hagas:
A. ¡Quiero desafiarte a que lo que has estado haciendo! No dejes de leer la Palabra de Dios.
B. Y quiero desafiarte a que sigas siendo parte del de en el que estás.
C. Y quiero desafiarte a que sigas teniendo un momento en silencio—un tiempo devocional diario.
IV. Conclusión