El cristianismo en su mejor momento
November 27, 2021 / Mario Fernandez / Vineyard Church North PhoenixEl cristianismo en su mejor momento
Mario Fernandez
Introducción
Efesios 2:14, 16 (NTV) 14Pues Cristo mismo nos ha traído la paz. Él unió a judíos y a gentiles en un solo pueblo cuando, por medio de su cuerpo en la cruz, derribó el muro de hostilidad que nos separaba. 16 Cristo reconcilió a ambos grupos con Dios en un solo cuerpo por medio de su muerte en la cruz, y la hostilidad que hacía entre nosotros quedó destruida.
Mateo 22:37-38 (NVI) 37”Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu ser y con toda tu mente” le respondió Jesús 38Este es el primero y el más importante de los mandamientos. 39El segunda se parece a este: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.
“No tiene ningún sentido reducir el evangelio del reino de Jesús a simplemente a que nuestros pecados sean perdonados sin tener en cuenta la justicia racial, o a las personas hambrientas que son alimentadas, o a los refugiados que son bienvenidos, o a nuestros cuerpos que son sanados, o a las relaciones que son reparadas o a que el medio ambiente está siendo restaurado. Esta ha sido la gran tragedia de la iglesia evangélica que muchos de nosotros los Baby Boomers hemos heredado a nuestros hijos. Es la tragedia de reducir el mensaje del Reino a un mensaje de salvación del alma sin tener en cuenta las condiciones materiales o sociales en las que vive la gente”. (Rich Nathan)
1. El Reino de Dios siempre ha abrazado la y la.
Deuteronomio 10:17-18 (NVI) 17Porque el Señor tu Dios es Dios de dioses y Señor de señores; él es el gran Dios, poderoso y terrible, que no actúa con parcialidad ni acepta sobornos. 18 Él defiende la causa del huérfano y de la viuda, y muestra su amor por el extranjero, proveyéndole ropa y alimentos.
Salmos 146:9 (NVI) El Señor protege al extranjero y sostiene al huérfano y a la viuda, pero frustra los planes de los impíos.
Proverbios 19:17 (ESV) El que es generoso con los pobres presta al Señor, y él le pagará por su acción.
2. Dios requirió que la nación, Israel, un de espiritualidad y justicia compasiva.
Isaías 58:1-9a (NTV) 1“Grita con la voz de un toque de trompeta. ¡Grita fuerte! No seas tímido. ¡Háblale a mi pueblo Israel de sus pecados! Sin embargo, ¡se hacen los piadosos! Vienen al templo todos los días y parecen estar encantados de aprender todo sobre mí. Actúan como una nación justa que nunca abandonaría las leyes de su Dios. Me piden que actúe a su favor, fingiendo que quieren estar cerca de mí. 3”¡Hemos ayunado delante de ti!’, dicen ellos. ¿Por qué no te impresionamos? Hemos sido muy severos con nosotros mismos, y ni siquiera te das cuenta”. “¡Les diré por qué! les contesto. Es porque ayunan para complacerse a sí mismos. Aun mientras ayunan, oprimen a sus trabajadores.
4¿De qué les sirve ayunar, si siguen con sus peleas y riñas? Con esta clase de ayuno, nunca lograrán nada conmigo. 5 Ustedes se humillan al hacer penitencia por pura fórmula: inclinan la cabeza como cañas en el viento, se visten de tela áspera y se cubren de cenizas. ¿A eso le llaman ayuno? ¿Realmente creen que eso agrada al Señor? 6¡No! Esta es la clase de ayuno que quiero: pongan en libertad a los que están encarcelados injustamente; alivien la carga de los que trabajan para ustedes. Dejen en libertad a los oprimidos y suelten las cadenas que atan a la gente. 7 Compartan su comida con los hambrientos y den refugio a los que no tienen hogar; denles ropa a quienes la necesiten y no se escondan de parientes que precisen su ayuda. 8 Entonces su salvación llegará como el amanecer, y sus heridas sanarán con rapidez; su justicia los guiará hacia adelante y atrás los protegerá la gloria del Señor. 9 Entonces cuando ustedes llamen, el Señor responderá. “Sí, aquí estoy”, les contestará enseguida”.
3. En el núcleo de la de encontramos compasión y justicia.
Lucas 4:17-19 (NVI) 17Y le entregaron el libro del profeta Isaías. Al desenrollarlo, encontró el lugar donde está escrito: 18“El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, 19a pregonar el año del favor del Señor”.
4. Jesús desafía a a hacer actos de compasión y justicia.
Mateo 25:31-40 (NVI) 31“Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, con todos sus ángeles, se sentará en su trono glorioso. 32 Todas las naciones se reunirán delante de él, y él separará a unos de otras, como separa el pastor las ovejas de las cabras. 33 Pondrá las ovejas a su derecha, y las cabras a su izquierda. 34Entonces dirá el Rey a los que están a su derecha: “Vengan ustedes a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. 35 Porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed y me dieron de beber; fui forastero y me dieron alojamiento; 36necesité ropa, y me vistieron; estuve enfermo, y me atendieron; estuve en la cárcel y me visitaron”. 37 Y le contestarán los justos: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, o sediento y te dimos de beber? 38 ¿Cuándo te vimos como forastero y te dimos alojamiento, o necesitado de ropa y te vestimos? 39 ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y te visitamos?” 40 El Rey les responderá: ‘Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el más pequeños, lo hicieron por mí”.
Conclusión